La inauguración de una nueva sede, instalación, planta, etc., sobre todo si es con invitados, es una de las acciones más importantes para la imagen de una empresa. Y aunque su organización es compleja y deja mucho margen a la creatividad, hay un esquema ineludible:
- Recepción a los invitados.
- Recepción a las autoridades en la entrada
- Recepción del máximo responsable de la empresa (anfitrión) a la autoridad que preside o invitado de honor en el exterior de las instalaciones (a pie de coche).
- Saludo de la autoridad o invitado de honor a los cargos más destacados de la entidad
- Descubrimiento de placa conmemorativa por parte de la autoridad o invitado de honor, acompañado por el máximo responsable de la empresa.
- Discursos por parte del anfitrión y autoridad que preside. En algunos casos pueden intervenir también representantes de instituciones colaboradoras.
- Recorrido por las instalaciones. Es el momento más complejo y, para simplificarlo, es conveniente formar grupos reducidos que permitan atender a las explicaciones del responsable de la entidad encargado de esta labor y moverse con facilidad. Siempre por orden de precedencia, el primer grupo lo formarán la autoridad que preside, el anfitrión y los principales invitados.
- Firma en el libro de honor.
- Cóctel, almuerzo o cena, según el caso y la hora. Actualmente se opta por un aperitivo o cóctel de pie. Además de abaratar el acto permite a los invitados intercambiar opiniones y acercarse a quienes ellos deseen.
- Despedida de las autoridades y de los invitados, con entrega de algún obsequio de recuerdo. La autoridad que preside o invitado de honor será despedido a pie de coche por quien le recibió a la llegada.